02 Ene Delitos Informáticos relacionados con Menores
Introducción
El concepto de delito informático está inmerso en múltiples debates, incluso entre los propios juristas. La discusión de los expertos radica principalmente en considerar el delito como nuevo, o bien, como un delito clásico cometido a través de un nuevo medio; las nuevas tecnologías. Si bien todos tienen parte de razón, no es menos cierto que el procedimiento de investigación de estos delitos, establece una diferencia inherente respecto al resto. La investigación en el medio tecnológico revierte unas características diferentes al resto de delitos, especialmente por la naturaleza de la prueba informática. Por ello, este Perito Judicial defiende la postura de que lo que califica al tipo de delito no es su naturaleza en sí misma, sino el medio a través del que se comete y la metodología que se requiere para su investigación.
Cabe por tanto clasificar como delito informático, todos aquellos delitos cometidos a través de un medio telemático y cuya vía probatoria se sustenta en la prueba informática.
La actualidad
Hoy día cometer un delito a través de internet puede parecer fácil, sencillo y de difícil probatura, y suele convertirse en un medio recurrente para emprender cualquier tipo de actividad delictiva amparándose en el anonimato del que se goza en la red.
Siendo conscientes y consecuentes con el gran avance que suponen las redes sociales, debemos ser más cautelosos que nunca en los contenidos que se vierten en las mismas. Los principales problemas vienen cuando la víctima o el ejecutante, resulta ser un menor de edad.
Algunos de esos delitos recogidos en el Código Penal y relacionados con menores se encuentran entre los siguientes: extorsión, explotación sexual, chantaje, amenazas, abuso sexual de menores, corrupción de menores, revelación de secretos, daños al honor, comunicaciones y producción, tenencia y/o distribución de pornografía infantil, etc…
Tipos de prácticas
El ciberacoso, conocido también con el término inglés cyberbullying, es el delito informático más habitual de los cometidos por parte de menores, que han trasladado el acoso cometido en las aulas a Internet aprovechando la falsa sensación de impunidad y anonimato que les otorga la red.
El Sexting es una práctica cada vez más habitual en la que los menores intercambian fotografías de carácter sexual o erótica a través de dispositivos móviles o de la propia red. Estos intercambios pueden convertirse en un arma de doble filo, ya que hay veces en las que esas imágenes son objeto de chantaje y terminan filtradas en las redes sociales o dentro de los círculos más cercanos de los propios menores.
El Grooming se trata de un ciberacoso cometido por parte de un adulto sobre un menor, al objeto de obtener imágenes de contenido erótico y/o pornográfico. Logrado su propósito, el acosador le amenazará con hacer público ese contenido si el menor no accede a sus peticiones. El acosador, tras una falsa identidad, consigue que el menor no pueda liberarse del mismo, hasta el punto de que su voluntad puede quedar sometida al acosador quien conseguirá del menor todo lo que necesite para satisfacer su deseo.
Conclusión
Existe por tanto entre los infractores la falsa creencia de que estas prácticas quedarán impunes, cuando la realidad demuestra que los hechos y las investigaciones periciales, motivadas habitualmente como consecuencia de la denuncia de la víctima, persiguen y consiguen castigar estas ilícitas prácticas.
En todos los casos anteriormente descritos, este tipo de conductas pueden verse sancionadas al amparo de nuestra legislación, teniendo siempre en cuenta que quien se ve involucrado en un delito de esta índole, ya sea de modo activo o pasivo, es un menor de edad y se encuentra amparado por normativa específica tanto nacional como internacionalmente.
Por todo ello, es necesario aumentar la información y la formación a los menores en el ámbito educativo sobre las ventajas y sobre todo los inconvenientes de las redes sociales, y la necesidad de animar a los mismos a denunciar con prontitud cualquier tipo de delito en el que se vean inmersos o sean conocedores de ese tipo de prácticas en terceros.
Si cree que necesita asesoramiento legal para resolver este tipo de delitos relacionados con menores, no dude en ponerse en contacto con nosotros o con cualquier experto letrado, y le prestaremos el mejor asesoramiento especializado en esta materia.